El día que muera el poeta,
yo se que tú no lo vas a llorar,
no tienes ningún sentimiento,
corazón de piedra, piel de metal.
Lo han de llorar las estrellas,
el sol y la luna eclipsarán,
y un manto de nubes espesas,
tanta pena querrán ocultar.
En bosques, montes y praderas,
plantas y flores marchitarán,
el arroyo será cual torrente,
y las aves dejarán de trinar.
El mar, su oleaje y la playa,
en el viento su lamento pondrán,
la noche y su loca bohemia,
al poeta también llorarán.
Si, podrán morir mil poetas,
mas la poesía jamás morirá,
mientras haya un alma que exprese,
sentimientos de amor y verdad.
El día que muera el poeta,
solamente no han de llorar,
los que, como tú, sólo tienen,
corazón de piedra, piel de metal.
yo se que tú no lo vas a llorar,
no tienes ningún sentimiento,
corazón de piedra, piel de metal.
Lo han de llorar las estrellas,
el sol y la luna eclipsarán,
y un manto de nubes espesas,
tanta pena querrán ocultar.
En bosques, montes y praderas,
plantas y flores marchitarán,
el arroyo será cual torrente,
y las aves dejarán de trinar.
El mar, su oleaje y la playa,
en el viento su lamento pondrán,
la noche y su loca bohemia,
al poeta también llorarán.
Si, podrán morir mil poetas,
mas la poesía jamás morirá,
mientras haya un alma que exprese,
sentimientos de amor y verdad.
El día que muera el poeta,
solamente no han de llorar,
los que, como tú, sólo tienen,
corazón de piedra, piel de metal.